Está comprobado que el amor puede surgir de muchas maneras, a primera vista, con la convivencia, inclusive en la obligación de un matrimonio concertado u obligado. Tal cual lo muestran las novelas históricas, donde el amor era delegado a un segundo grado dando importancia a los intereses monetarios o de título nobiliario.
La historia de Victoria y Robert está lejos de ser algo cercano a eso, su relación es un tanto hostil y enemiga al inicio, y es que al ser ambos de personalidades avasallantes, mantienen una interacción un tanto peculiar.
Robert William Evans, conde de Arundel, próximo sucesor al ducado de Norfolk, título de los más antiguos de la nobleza inglesa que remonta al año 1347 d. C. Es un tipo que básicamente puede tener a cualquier mujer a sus pies, y no sólo por lo viril qué pueda verse, sino por el estatus en el que se encuentra. Codiciado, libertino, amado y odiado en la misma medida,aunque su deber está inclinado a concretar un matrimonio por obligación. Hasta que cierto día una mujer solterona se cruza en su camino, y que es la única capaz de contestarle y llevarle la contraria a diestra y siniestra.
Victoria Jones es una mujer que a sus 25 años es considerada una mujer solterona, aunque su interés no es casarse, sino rescatar a sus hermanas, no contaba con que su vida se cruzara con un hombre guapo y que encima no solo la hace enojar sino que causa le causa por partes iguales matarlo o amarlo.
Ambos se entremezclan en un tira y afloja bastante fuerte, donde el deseo hace mella en ambos y los sentimientos hacen su aparición poniéndolos en una encrucijada sobre el deber ser y lo que realmente quieren.
Como diríamos actualmente un enemies to lover en todo su esplendor.
Me encantó que la autora retrató una época muy clara en cómo las mujeres eran tomadas sin derecho a decidir en un matrimonio. Prejuiciándolas sino llegaban a casarse, de las nulas decisiones que tenían, y delegadas a la reproducción y labores domésticas. Así mismo el papel que los hombres desempeñaban, los deberes como pertenecientes a la nobleza y lo obligados que algunos se sentían de adquirirla un compromiso con una mujer que no les gustaba.
La variedad de personajes es algo que enriqueció la historia, no olvidemos que en ese tiempo las familias eran grandes.
Alice y Rose, unas casamenteras bien hechas, dos mujeres que la vida les enseñó cruelmente a salir adelante, y a identificar a las personas, haciéndolas en ocasiones cupidos y celestinas.
Una novela que marca momentos muy importantes para los personajes principales, haciéndolos ver que su atracción va mucho más allá de lo que piensan. La narrativa que denota dramatismo, comicidad, romance y erotismo. Erotismo que básicamente se describe entre risas y placer, y luego sw convierte en una necesidad de ambos.
Las historias de amor no siempre comienzan con besos y abrazos, a veces las historias de amor se forjan entre unos gris como el acero y unos ojos negros como la obsidiana, y a veces el destino lleva por caminos errantes.
Gracias por pasarte a leer la reseña. Espero te haya gustado, te recuerdo que este libro está en Amazon versión digital.
Con amor