No es un secreto que está novela se desarrolla bajo un matrimonio concertado bajo diferentes intereses, tanto políticos como personales.
Sienna es una joven chica en plena flor de la juventud, ávida por vivir y disfrutar. La relación con su padre no es la típica relación añorada, sentirse menospreciada por quien debería mostrarle amor, protección y apoyo, aceptará un matrimonio para liberarse de ese yugo. Sin embargo, se dará cuenta, que su matrimonio también es una jaula, donde los lujos, el dinero y el estatus no le dan lo que tanto anhela, sentirse amada.
Aunque en su proceder, se dará cuenta que su esposo no es lo que imaginaba, y que sus atenciones para con ella van más allá de un contrato matrimonial, provocando ella que afloren sentimientos contradictorios, revalorando lo que una vez sintió por aquel que creía era el amor de su vida.
Máximo López sabe que el poder y el dinero otorgan todo lo que desee, pero hay una sola cosa que no puede tener, y ese es el amor. Su plan, fue hacerla de su propiedad, después demostrarle que es su dueño y esperar a que lo amara. Pero hay una sola cosa que él no contemplaba, y ese es sus enemigos y el interés que atraería casarse con la hija del próximo presidente de Colombia.
En la mafia la muerte, las traiciones y el contrabando están al acecho, pero también los secretos, esos que han estado ahí latentes a la espera de salir a la luz, donde se entretejen los caminos, provocando dolor, sorpresa, añoranza, sufrimiento o inclusive felicidad.
Personajes como Javier y Fernanda, harán que la lectura se convierta amena y con la ansía de saber que pasará.
Máximo y Sienna, se verán inmersos en una inminente atracción física, sexual y perversa, detonantes para provocar un acercamiento y valorar sus emociones y sentimientos.
Una novela con matices oscuros e inusuales, una narrativa ligera, fluida y expectante. Donde a veces se puede tener todo, y no ser feliz, pero que depende de nuestra misma condición y reflexión humana, valorar más el amor y entender que los caminos pueden ser con piedras y espinas, pero con la seguridad que la vida siempre nos brinda segundas oportunidades para ser feliz.
Gracias por pasar aquí.
Con amor
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