Reseña: Asase Ye Duru - Camilla Fava

 

¡Hola amigos! Poniéndome al día con mis lecturas pendientes les traigo recomendación de la última historia que he leído. Una historia que ha sido publicada recientemente. Se trata de "Asase Ye Duru" de Camilla Fava.

Les dejo mi opinión.

ASIN: B09B6KW9NC

Fecha de publicación: 6 Agosto 2021

Idioma: Español

Número de páginas: 233 páginas

Formato: digital y tapa blanda.

Si les soy sincera no sé cómo empezar esto.

Debería saber cómo se hace, he leído miles de novelas románticas… ni siquiera sé si esto es una novela romántica.

¿Quién soy? Agatha Kanaan la mejor cantautora y estrella musical. Ganadora de Grammys, reconocida en el mundo entero y vocalista de la gran banda de rock, Leiza.

Ryan Pound es mi mejor amigo de toda la vida, asesor de imagen, reservado en su vida privada y tiene cierta debilidad por una ricachona de New York.

Lo que ninguno de los dos sabe es que un llamado telefónico nos cambiará la vida.

¿Les ha pasado comenzar una historia y que se sientan identificada completamente con ella? Pues es lo que me sucedió con «Asase ye duru» el prólogo me conmovió al punto de las lágrimas ya que las palabras tocan un tema difícil a nivel personal, como lo es la pérdida de un familiar. Por lo que me sumergí de lleno en la lectura.

“Asase Ye Duru” cuenta la historia de Agatha Kennan, una chica que se ha abierto camino en el mundo de la música, convirtiéndose en la cantante del momento. En la cima de la fama y de la popularidad, con una familia que la ama y unos amigos que la apoyan siempre, siente que es completamente feliz. A pesar de tener a su papá atravesando una enfermedad tan dura como lo es el Alzheimer, ella no se da por vencida, su familia y sus amigos son sus pilares.

Por otra parte, tenemos al asesor de imagen y mejor amigo de Agatha, Ryan Pound, un hombre que no necesita presentación. Es el mejor en su ámbito, contratado por políticos y empresarios que necesitan mejorar su imagen ante el público. Es deseado por mujeres y también por hombres, y él sabe el sex appeal que desprende. No le teme a meterse a la cama con las esposas o amantes de los empresarios que lo contratan. Sin dudas, todo un Don Juan. Ryan vive su vida libremente, cuando no trabaja visita a su amiga y comparte con la familia de ella también.

Sin embargo, tanta felicidad ya me daba miedo, creo que estas dotes de bruja se deben a tantas lecturas que tengo en mi haber. Suponía que se vendría lo doloroso.

Agatha y Ryan comparten una videollamada cuando ella recibe la peor noticia de su vida, una noticia que trastoca su mundo y cambia completamente el ritmo de vida que llevaba. Ryan se desespera por no estar presente para apoyar a su amiga, se siente impotente al estar a varios kilómetros lejos de ella, organiza sus responsabilidades y vuela directo a ser el apoyo que su amiga tanto necesita.

La pérdida física de alguien nunca es fácil de asimilar y mucho menos la de un familiar. Los que quedamos en este plano nos formulamos miles de preguntas al respecto sin encontrar una respuesta que pueda ser capaz de reconfortarnos. Considero que no hay una forma de asimilar un fallecimiento, cada uno lo hace como puede y de la manera en que considera que le hace bien, que logra calmar el dolor. Agatha no entiende cómo pasó de estar organizando su próximo disco a organizar el año escolar de sus sobrinos, es algo que escapa de sus manos, nunca esperó encontrarse en ese momento.

La autora rompió mi corazoncito con ese accidente, no me lo espera, y creo que quedé en shock junto como Agatha. Entendí la vorágine de dolor que estaba atravesando, me tocó muy de cerca su sufrimiento. El perderse en un punto invisible, querer acostarse solamente a llorar para olvidar el dolor que estaba rompiendo su alma, sin dudas fueron unas escenas muy fuertes.

Ryan por su parte también luchaba contra el dolor de la pérdida, sumado a que debía ser apoyo de su amiga y enfrentar los problemas de su trabajo, el cual involucraba su enamoramiento hacia la esposa trofeo de su jefe. Toda una montaña de problemas difícil de atravesar.

Me daba pena leer la situación que se vieron obligados a enfrentar y asimilar Ryan y Agatha. Cada uno tenía su vida organizada, con planes a futuro y de la noche a la mañana debieron reorganizarse y hacerse cargo de cinco pequeños que quedaron huérfanos, si bien Agatha tenía su tutela, Ryan no era capaz de dejarla sola. Ambos debieron dejar de lado su egoísmo y aprender a cuidar de esos pequeños.

¿Qué si ya había llorado mientras leía? ¡Claro que sí! Sufría por Agatha y por esos pequeños, los cuales no entendían nada de lo que ocurría. Sin embargo, el amor de la familia es fuerte y unidos comenzaron el arduo trabajo de convivir juntos, los niños aprendiendo de los adultos y viceversa. Claro que la convivencia no es fácil para los niños, tampoco para los adultos, y menos cuando comienzan a confundirse las líneas de amistad.

La historia te atrapa desde el inicio, el cual es un tanto doloroso, pero es hermoso leer cómo los protagonistas crecen a nivel personal y se unen aún más para sobrellevar el dolor y las nuevas responsabilidades. La trama, los secretos familiares y ciertas escenas me dejaron realmente sorprendida, ¡no me lo esperaba! Sin dudas, me encantó. 

“Asase ye duru” se convirtieron en mis palabras favoritas, muy significativas, las cuales describen perfectamente la historia, ese toque por parte de la autora me enamoró y me quedará grabado a fuego. Una historia que logra que finalices la lectura con un suspiro y lágrimas de felicidad.

Si se animan a leer la historia, háganmelo saber en comentarios. Nos leemos la próxima.